Hace 20 años, esta cuenca y sus maravillas comenzaron a posicionarse dentro del circuito turístico de Aysén como una escala dentro de la ruta de la Carretera Austral. Y eso estuvo bien en su momento. Sin embargo hoy, con el mayor desarrollo turístico en la zona, ya es tiempo de darle al Chelenko el lugar que se merece como destino en sí mismo; por una infinidad de razones: el enorme territorio que hay por descubrir y las múltiples actividades al aire libre que se pueden hacer, la variedad de ecosistemas y paisajes, los muchos poblados, bahías y costumbres por conocer.
“El lago General Carrera tiene además, el mejor clima de la Patagonia, sin grandes vientos, sin demasiadas lluvias ni frío extremo, con muchos días de sol y temperaturas agradables, ideales para realizar actividades al aire libre”, nos cuenta Paula Christensen de Mallín Colorado, y no es difícil entender por qué su familia decidió establecerse aquí cuando viajaban por la zona hace tres décadas.
Esto se debe a su especial geografía: la presencia de Campos de Hielo hacia el oeste provoca la condensación de la humedad proveniente del Océano Pacífico, con lo cual el clima es bastante seco –sumado a la influencia que entra desde la pampa patagónica argentina- propiciando muchos días despejados al año y lluvias cortas, generalmente nocturnas (800mm al año). La temperatura máxima en verano es de unos 30ºC y la mínima alcanza los 4ºC. “Por la latitud, los días estivales son muy largos, con 16 a 18 horas de luz. ¡Mucho tiempo para explorar y horas de sol para bañarse en el lago!”, dice Paula.
El Chelenko es un destino al que vale la pena dedicar tiempo, un destino para recorrer con calma y alcanzar a conocer y disfrutar mejor de todo lo que tiene para ofrecer. Porque en la Patagonia simplemente, lo dice el dicho popular: “el que se apura pierde el tiempo”.